Yoga, Chi kung y Terapia
en el Embarazo
El embarazo es una etapa única en la vida de las mujeres que conlleva una revolución física y psicológica.
La preparación emocional, es tan importante como la preparación corporal.
Durante el embarazo se producen unos de los mayores cambios físicos en la vida de una mujer. El útero, la cadera, los pechos, el sistema hormonal… y distintas partes del cuerpo que se manifiestan como “molestias” asociadas al embarazo.
Yoga y Chi kung acompañan sabiamente este proceso de cambio. Aportan:
- Conciencia corporal.
- Respiración y relajación.
- Ejercicios y estiramientos que alivian las molestias: ciática, dolor en la región lumbar, dolores de cuello y espalda, piernas cargadas.
- Ejercicios y estiramientos que tonifican, estiran, energizan y preparan el cuerpo para el parto y los meses siguientes: suelo pélvico, cadera, respiraciones y posturas que favorecen el parto.
La maternidad también supone grandes cambios emocionales y vitales.
Embarazo, nacimiento y crianza nos confrontan con:
- El encuentro con partes desconocidas en nuestro interior, reacciones emocionales inesperadas, aspectos que creíamos superados…
- El miedo al parto y al dolor. Miedo al cambio, a la responsabilidad, a la renuncia…
- Cambios bruscos de humor, a veces sentimientos de vulnerabilidad o incapacidad.
- Con frecuencia afloran o se agudizan las diferencias con la pareja.
Todos estos cambios son una oportunidad excelente para conocernos mejor. «Conocerse a sí misma» es una gran cualidad para la maternidad.
En esta etapa suele cambiar la mirada sobre el mundo, sobre las relaciones, sobre la pareja.
En general nos volvemos más sensibles, más conscientes. Y el contacto directo con la fuerza de la vida puede ser una experiencia iniciática que nos transforme a mejor.